Coronavirus
Los peregrinos que hacían el camino de Santiago cuando el pasado 14 de marzo se decretó el estado de alarma han tenido que frenar su ruta por el coronavirus.
En el albergue de peregrinos de Fuenterroble de Salvatierra, en Salamanca, acoge a un grupo de caminantes de todas las nacionalidades como Edoardo, natural de Roma, que llegó allí el 13 de marzo para pasar una noche y ya lleva más de un mes junto a otras once personas.
El padre Blas que mantiene el albergue dice que la mayoría pensaba "que iban a ser quince días, se quedaron y, desde entonces, hemos ido adaptándonos a la situación lo mejor que hemos podido"
Cada uno hace lo que mejor se le da hacer: la comida, cortar madera, limpieza. Así van pasando los días y con las nuevas tecnologías que les ayudan a no perder el contacto con sus familiares a los que ven prácticamente a diario por videollamada.
El camino seguirá tras el estado de alarma
Algunos de ellos tienen previsto volver "a casa", a su país, en cuánto todo pase. Otros, sin embargo, quieren continuar su viaje y hay quien no descarta quedarse en Fuenterrobles " quedarme en Fuenterroble un año no era mi idea pero, además, el coronavirus lo cambia todo. La gente está bloqueada sin poder ir a su país, pero aquí tenemos jardín, mucho espacio, posibilidad de hablar con gente y se está bien”.