Animales
Se ha aprobado el proyecto de ordenanza de recogida de residuos de Valladolid, el cual apuesta por la "concienciación" con estas novedades sobre los animales.
Hay novedades en Valladolid en cuanto a la recogida de residuos. La Junta de Gobierno aprobaba este lunes el proyecto de Ordenanza de recogida selectiva de residuos domésticos y de limpieza viaria en la ciudad. Esta regula la prestación de los dos servicios que el Ayuntamiento de Valladolid ejecuta de manera directa a través del Servicio de Limpieza.
El concejal de Salud Pública y Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento, Alberto Cuadrado, presentaba la ordenanza en una rueda de prensa, en la que precisaba que resultaba "muy necesaria" la renovación debido a que la normativa que se aplicaba databa "de 1993". Ha incluido que "no tiene nada que ver" cómo se gestionaban los residuos entonces con lo que se lleva a cabo en 2024.
Cuadrado ha destacado en diferentes ocasiones la importancia que pretende conceder su equipo a la "concienciación" en determinados aspectos de la forma en la que ciudadanos y establecimientos separan y depositan los residuos, ya que ha reconocido que existen varias facetas en las que se observan problemas.
La ordenanza entrará en vigor el 1 de enero de 2025. De la misma manera, se actualiza el régimen sancionador, que abarca sanciones leves con multas de hasta 750 euros, graves, con entre 750 y 1500 euros y muy graves, con hasta 3000 euros como máximo.
El concejal también ha señalado otras novedades, como que la ordenanza recoge que los propietarios de mascotas, además de recoger las heces, tendrán ir provistos de botella con agua jabonosa con el fin de minimizar el efecto de las micciones.
A pesar de ello, es preciso recordar que la Ordenanza reguladora de la convivencia responsable y protección animal que se aprobó en octubre de 2018 ya establecía que la persona propietaria de un animal tenía que adoptar las medidas necesarias con el fin de evitar las micciones en las fachadas de los edificios y en el mobiliario urbano y que, en caso de producirse, se tendría que mitigar su efecto utilizando agua jabonosa u otros procesos que garanticen la limpieza del lugar.
Esta ordenanza marca los tres tipos de recogida que ya se conocen: la ordinaria (mediante contenedores en la calle), la demanda (recogida de enseres) y entrega al poseedor (en los puntos limpios).
Con el fin de garantizar la limpieza de la vía pública, se establecen ciertas medidas preventivas, correctoras y reparadoras encaminadas a evitar ensuciar o deslucir las vías. Es de esta manera cómo se regulan las obligaciones o prohibiciones referentes a los materiales de construcción y retirada de escombros en la vía pública, limpieza de quioscos, terrazas u otras instalaciones de venta, limpieza de inmuebles, operaciones de carga y descarga, retirada de nieve o hielo, transporte de tierras, escombros o maderas, limpieza de vehículos y otros elementos similares.
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