TRANSPORTISTAS
Las restricciones al tráfico en Madrid por los episodios de alta contaminación han afectado no solo a particulares, sino también a quienes utilizan el coche como herramienta de trabajo.
Era una de las grandes dudas después de que el Ayuntamiento de Madrid restringiera el acceso al perímetro interior de la M-30 a los coches impares, por ello algunos agentes de movilidad han permitido el acceso a quienes necesitaban utilizar su coche para trabajar pese a tener matrícula par.
Es el caso de un comercial, quien a primera hora de la mañana no tenía del todo claro si podía llevar a cabo su trabajo, pero a su llegada a uno de los accesos donde se situaban agentes de la Policía, le han explicado que debía aparcar su vehículo dentro de un parking y continuar su trayecto a pie.
Algunas empresas que disponen de varios vehículos han tenido que dejar a sus trabajadores aquellos con matrícula impar para que pudieran desarrollar su trabajo.
Repartidores y comerciales que han tenido que acudir al centro de la capital aseguran que no solo no han tenido problema, sino que en un día como hoy se trabaja mejor debido al descenso de tráfico en el centro, lo que les ha permitido llegar antes a sus destinos y poder aparcar sin problema.
Quienes se han arriesgado y han entrado sin permiso dentro de la almendra central de la M-30 no han tenido la misma suerte y han sido sancionados con una multa de 90 euros.