Crisis migratoria
Las embarcaciones con migrantes llegan a El Hierro con decenas de personas a bordo, muchas de ellas en condiciones extremas. Quien no sobrevive, es enterrado en la isla.
Continúa el goteo de migrantes en el Atlántico, concretamente en Canarias. Tan solo en este fin de semana han llegado a Lanzarote dos cayucos con 139 migrantes, de los cuales, 26 eran niños. En la madrugada del lunes, han llegado 76 migrantes a la isla de El Hierro, a bordo de una embarcación que procedía de Senegal.
Un problema humanitario que preocupa debido a las condiciones en las que muchas de estas personas llegan a las Islas Canarias. Tal es el estado de algunos de ellos, que muchos no consiguen sobrevivir: "Las dos caras de una misma moneda, quienes mueren y quienes logran sobrevivir", así relata la situación la voluntaria Haridian Marichal, que, en este caso, muestra la cara más oscura de esa moneda de la que habla.
Cuando los ocupantes de estas embarcaciones llegan en condiciones extremas y no consiguen sobrevivir, se les entierra en la isla. Son muchos los que pierden la vida en el camino que realizan por cambiar a una vida mejor y, ante esto, son enterrados en los cementerios municipales. Prácticamente sin testigos, identificados con un código formado por letras y números. Es el caso de la isla de El Hierro.
Solo en lo que va de año, esta isla ha recibido a 9.000 migrantes que han llegado mediante cayucos. De los cuales, 18 están enterrados en distintos cementerios del lugar. En uno de ellos, se puede ver a los últimos enterrados. En solo esta semana, han muerto 6 de ellos y se han identificado como "migrante R4, migrante R2...".
"Lo que hemos hecho como vecinos y vecinas de esta isla es despedirles como se merecen, con la mayor dignidad y respeto"
En diferentes nichos, los fallecidos han sido enterrados por los propios vecinos de la isla: "Lo que hemos hecho como vecinos y vecinas de esta isla es despedirles como se merecen, con la mayor dignidad y respeto", alega Marichal que muestra a Antena 3 Noticias cómo están distribuidos e identificados los nichos.
Pero, a pesar de solo poder diferenciarlos con un código numérico y alfabético, los vecinos tienen el objetivo de mantener la humanización de estas personas que llegan a la isla y, por ello, decoran las tumbas con algunos regalos como por ejemplo una de las vecinas que realiza a mano cayucos, a modo simbólico. "Estos están hechos a mano por una vecina que acompaña en los entierros", explica la voluntaria.
Una situación que no parece revertir a pesar de los intentos políticos y sociales para conseguirlo. "Si esto no nos remueve las entrañas y el corazón, entonces estamos perdiendo mucho como sociedad", sentencia Haridian.
El presidente del Gobierno de Canarias,Fernando Clavijo, ha apelado a la responsabilidad en este contexto y manda un mensaje claro a los partidos políticos, sobre todo por la Ley de Extranjería: "No se puede convertir en un problema político porque es un problema humanitario", destaca Clavijo.
Según el último informe sobre inmigración irregular del Ministerio del Interior, que recoge datos hasta el 15 de julio de 2024, alrededor de 20.000 migrantes han llegado a Canarias por vía marítima, lo que se traduce en un 161% más que hace un año.
Preocupa especialmente el incremento de mujeres y niños y niñas que abandonan su país en busca de una vida mejor, un asunto al que ha hecho referencia Clavijo, que ha asegurado que si la mar todavía no está buena y en un solo día llega casi una veintena de niños y niñas, "lo que nos espera por delante es una afluencia muy complicada de poder dar una respuesta mínima a esos menores".
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