HAN OCULTADO QUE ACTUARON CERCA DE LA MUJER QUE PERDIÓ UN OJO
En una rueda de prensa convocada de urgencia, el conseller de Interior, Ramon Espadaler, ha anunciado que ya han comunicado al juez que investiga el caso que los siete agentes de esta furgoneta, la Dragó 414, han reconocido ahora que bajaron de la furgoneta -a excepción del conductor- y que "creían recordar" que el escopetero hizo un disparo de advertencia, sin proyectil. Ante esta información, les han apartado de la unidad antidisturbios y les han abierto una información reservada por su "evidente indisciplina".
En todo caso, el conseller ha insistido en que, "a día de hoy", sigue manteniendo la teoría esgrimida desde el principio por el Departamento de Interior, en el sentido de que en la huelga general del 14 de noviembre de 2012 los Mossos d'Esquadra no dispararon pelotas de goma, pese a que el juez ha imputado al escopetero y al subinspector de otra furgoneta de la unidad Dragó-40, al considerar que las lesiones oculares sufridas por Quintana son compatibles con el impacto de una pelota de goma.
Espadaler ha señalado que, en el marco de la investigación interna que mantienen abierta los Mossos d'Esquadra sobre estos hechos, en las últimas horas se ha descubierto que, en contra de lo que habían sostenido hasta ahora, una furgoneta de los antidisturbios se apostó en el cruce entre paseo de Gràcia y Gran Via, en el lado mar, en una zona muy próxima al lugar donde Quintana resultó lesionada.
Los agentes siguen activos en el cuerpo, según el conseller, aunque alejados de las funciones de orden público, a la espera de que finalice el expediente que se les ha abierto, ya que será entonces cuando "se adoptarán las decisiones que se tengan que tomar".