HAN DEMOSTRADO QUE NO ES ILEGAL
Los habituales de los centros de mayores de Hospitalet de Llobregat están felices porque podrán volver a cantar "bingo". Desde hace tres semanas jugar estaba prohibido. Los agentes interrumpieron la sesión binguera de un local porque la partida de jubilados podría infringir la ley de juego.
"Nos han quitado la prohibición, se han dado cuenta de que no hay delito" explica una mujer. Según la normativa el juego está permitido siempre que la apuesta no supere los 320 euros. Los ancianos han demostrado que aquí apenas se llega a los 40 euros. Cada cartón cuesta 70 céntimos y el dinero recaudado se invierte en la compra de sencillos premios. "No hacemos daño a nadie, aquí estamos felices" cuenta otra asidua de un centro de mayores de la localidad.