Agresiones
Se ha elevado la alerta policial y se desplegarán los fines de semana una serie de dispositivos especiales para reforzar la seguridad.
La alerta es máxima en Santiago de Compostela después de los acontecimientos ocurridos en menos de una semana. En la madrugada del domingo pasado, un joven de 17 años resultó herido después de sufrir una agresión con cuchilladas en los alrededores de la discoteca Vanitas, en Ensanche compostelano. Un incidente que ocurrió una semana después de que un varón de 31 años también fuera apuñalado en las inmediaciones de otro local de copas, La Grandota, en la misma zona de marcha. Desafortunadamente, en este caso la víctima no pudo recuperarse de las heridas y fallecía dos días después.
Ante estos hechos, se ha elevado la alerta policial y se ha celebrado en la capital gallega una reunión extraordinaria de seguridad. En ella se ha acordado "plantear de cara a los próximos fines de semana una serie de dispositivos especiales en los que se van a integrar la policía local, la nacional y la adscrita de Galicia tres policías: local, nacional y adscrita de Galicia -que tienen competencia en materia de menores-", expuso la subdelegada del Gobierno en A Coruña, María Rivas. Además, ha subrayado la necesidad de "reforzar los contactos con empresarios de ocio y asociaciones de vecinos", con el objetivo de "mantener un contacto directo con las personas que sufren las consecuencias".
Por su parte, el alcalde la ciudad, Xosé Sánchez Bugallo, mostró su preocupación por la implicación de menores en estos casos y ha hecho un llamamiento a los locales de ocio nocturno para no permitir su acceso a los mismos.
El delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones ha recalcado que se aumentará el número de efectivos de la Policía Nacional pasando de 244 a 254 agentes, a los que se sumarán 21 en prácticas en Santiago de Compostela.
Varios incidentes en dos meses
Además de los dos incidentes mencionados anteriormente, Antena 3 Noticias ha podido hablar con testigos que han presenciado más reyertas como estas y que indican que este tipo de incidentes han aumentado en cuestión de dos meses.
Así pues, tal y como relatan, la hostilidad es cada vez mayor en la zona de copas compostelana muchas veces sin "venir a cuento". "Después de una pequeña discusión en las inmediaciones de uno de los locales nocturnos, se acercó una banda de personas latinoamericanas y empezaron a patadas y puñetazos con todas las personas que se encontraban a sus pasos, incluidas chicas", explica uno de esos testigos. "Finalmente, no se pudieron denunciar los hechos porque cuando la policía llegó ya se habían ido", añade.
"Un segundo altercado tuvo lugar en el interior de una de las discotecas. Se inició una discusión entre dos personas. Posteriormente los porteros expulsaron del local al que inició la disputa. Quince minutos después, los porteros invitaron a salir al otro implicado y fuera le estaban esperando varias personas que le propinaron una serie de puñetazos", relata a Antena 3 Noticias.