Agresión
Decenas de personas han protagonizado una agresión múltiple en un hospital de Motril con el resultado de 4 personas malheridas.
4 personas han resultado malheridas tras una brutal y multitudinaria agresión en las Urgencias del Hospital Santa Ana en Motril. Las víctimas recibieron múltiples patadas, arañazos y puñetazos además de amenazas de muerte.
Al parecer la agresión se desató tras una llamada de ayuda por el mareo del familiar de un enfermo que estaba esperando información, no se sabe en qué momento acabó en una agresión multitudinaria. El resultado, un enfermero, una celadora y dos agentes de seguridad malheridos.
En las inmediaciones de Urgencias comenzaron a juntarse decenas de familiares del primer enfermo que al ver cómo el otro conocido se mareaba pasaron en cuestión de segundos de pedir un médico a cargar contra los profesionales del centro. La Policía está tratando de averiguar lo ocurrido y de identificar a las personas que intervinieron en la agresión.
Granada Hoy publica que la agresión comenzó con gritos de: "Un médico, hijos de puta", al tiempo que los profesionales atendían a la persona mareada y lo llevaban a la zona de Urgencias. El personal de seguridad intentó calmar al resto de presentes pero como respuesta recibió el primer puñetazo.
Según relata uno de los presentes a La Voz del Sur: "Nunca había vivido una agresión de esta magnitud…de buenas a primeras nos rodearon y empezaron a pegar patadas y puñetazos, fue un todos contra cuatro".
Condena a la agresión
La gerencia y el equipo directivo del Área de Gestión Sanitaria Sur de Granada manifestaba la "tolerancia cero" y su "repulsa" a las agresiones físicas o verbales "de las que son objeto durante el desempeño de sus funciones".
El pasado mes de enero desde CSIF denunciaban que se estaba gestando la "tormenta perfecta" para que cada vez sean más las agresiones que los sanitarios tienen que soportar. Los insultos y las intimidaciones a sanitarios, denuncian, que cada vez son más frecuentes por parte de pacientes y que se vienen sucediendo desde hace mucho tiempo.
"La gente lo paga con quien le ve la cara", el responsable de Sanidad del CSIF ha dicho que "esto se veía venir", ya que tanto los insultos como las amenazas se producían incluso antes de existir un aumento de virus respiratorios que colapsase los centros.