Ataque epiléptico
Días después del suceso, los policías visitaron al menor que se encontraba en el Hospital.
En La Buena Noticia de hoy nos tenemos que trasladar hasta Almería. Allí, la Policía Nacional ha socorrido a un niño cuando sufría un ataque epiléptico en plena calle. Se trata de un menor de seis años, que ya se recupera en el Hospital Universitario Torrecárdenas. La rápida intervención de los agentes resultó clave para salvar la vida del niño.
Días después del suceso, los policías que intervinieron visitaron al menor que se encontraba en el Hospital para interesarse por el estado de salud del pequeño.
Así ocurrió todo
Agentes de la Policía Nacional que patrullaban en el barrio de El Puche de la capital fueron los que socorrieron al menor de seis años alertados por su madre, que les comunicó que había perdido el conocimiento.
Los policías asistieron en el lugar al menor y comprobaron que las constantes vitales estaban comprometidas por lo que facilitaron su traslado al Hospital Universitario Torrecárdenas, donde el personal médico consiguió estabilizarlo.
La familia de este pequeño registró varias notas de agradecimiento en la comisaría por la dedicación de la Policía Nacional con lo ocurrido.
Días después del suceso, los dos agentes que actuaron en el suceso, solicitaron visitar al menor, que todavía se encuentra en observación en el área infantil del Hospital Universitario Torrecárdenas. Le regalaron material policial infantil y charlaron con su familia sobre la experiencia que habían compartido.
Epilepsia
Desde vivirconepilepsia.es explican que "el término 'Epilepsia' describe un trastorno del cerebro que origina una predisposición a sufrir crisis epilépticas repetidas". Se trata de un trastorno que está causado por un funcionamiento anormal esporádico de un grupo de neurona. Su único síntoma son las crisis epilépticas, que se manifiestan de manera intermitente.
De manera habitual, una crisis epiléptica ocurre debido a un exceso de actividad eléctrica de un grupo de neuronas hiperexcitables. Puede afectar a diferentes funciones, tales como el movimiento o el comportamiento, o incluso al nivel de consciencia.