ESTABA ATURDIDA Y NO RECORDABA NADA
El agente de Policía Portuaria medió entre la víctima y los agresores, que huyeron del lugar y dejaron a la joven semiinconsciente. La mujer estaba aturdida y manifestó que no se acordaba de nada, por lo que no pudo identificar a ninguno de los agresores.
Una patrulla de la Policía Local la trasladó a un centro sanitario para un reconocimiento médico. De momento, no hay constancia de que la joven haya interpuesto denuncia.