Incendio Bejís
Antena 3 Noticias ha tenido acceso en exclusiva al parte de incidencia de Adif, que asegura que la maquinista no pudo iniciar el retroceso al haberse activado la llave de apertura de puertas. Una vez que logró volver a ponerse en marcha, recogió a varios pasajeros que se habían bajado voluntariamente.
El incidente de un tren en Bejís, donde los pasajeros salieron huyendo al toparse con un incendio casi al lado del transporte, sigue dando que hablar. Mientras los pasajeros insisten en que fue la maquinista del transporte ferroviario quien les abrió la puerta para salir después de presionarla, Adif lo niega, al igual que RENFE. Ya en un primer momento, la compañía ferroviaria aseguró que la maquinista no había autorizado a ningún pasajero a abandonar el tren, contradiciendo las versiones de algunos pasajeros que afirmaban que sí había abierto la puerta tras insistirle.
Ahora se ha sabido que, en el parte de incidencia, Adif insiste en que la maquinista no abrió ninguna puerta. Así lo ha podido saber Antena 3 Noticias, que ha tenido acceso en exclusiva a dicho comunicado, y donde la compañía ferroviaria señala que la maquinista no pudo dar marcha atrás, porque habían accionado la llave de apertura de la puerta y cerca de una veintena de pasajeros se habían bajado del tren de forma voluntaria.
Ese mismo parte de incidencia recoge que la maquinista logró reponer la llave de apertura de la puerta y que, tras conseguir que los pasajeros que habían salido regresaran al tren, empezó a dar marcha atrás. Según inició el retroceso, de acuerdo con las palabras que indica la compañía, la maquinista informó de que había cerca de una veintena de pasajeros que estaban heridos y que al menos había diez que presentaban quemaduras en brazos o piernas.
Las consecuencias del incendio
La gran incógnita del incendio es cómo pudo autorizarse que el tren partiera hacia su destino aun estando el incendio presente y que nadie avisara de ello. De los pasajeros, la mayoría han sido dados de alta, aunque una mujer de 69 años fue ingresada en estado grave, que formaba parte de aquellos pasajeros que la propia maquinista informó que tenía quemaduras de diversa consideración, aunque, en su caso, fue una de las que se llevó la peor parte.
Horas después, el incendio, que hizo huir a los bomberos a causa de su elevada magnitud, seguía sin ser sofocado, y existía pesimismo, dado que no había previsión de lluvias, tal y como sucedía en Alicante, donde el agua estaba contribuyendo a apagar el incendio en Vall d´Ebo, el peor de la última década en la Comunidad Valenciana. Sin embargo, el agua terminó por llegar contra todo pronóstico y ya evoluciona favorablemente.
Nadie asume responsabilidades
Tanto la compañía como la propia Administración pública defienden sus versiones, asegurando que se siguió el protocolo adecuado. En el caso de los viajeros, aseguran que insistieron reiteradas veces a la maquinista para que finalmente les abriera la puerta, algo que Adif y RENFE niegan. La fuerte polémica surgida a raíz de este incidente ha provocado que se abra una investigación para tratar de aclarar lo sucedido.
La gran contradicción que existe entre los testimonios de los pasajeros y tanto de RENFE como de Adif ha reavivado aún más el debate sobre qué o quién falló. Además, el Partido Popular ha pedido la comparecencia de la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, para que explique lo que ocurrió en el trayecto de aquel tren, y que sigue sin esclarecerse.