Los acusados por la muerte de un joven en una discoteca de Málaga, detenidos a la espera de pasar a disposición judicial

Pablo, un joven malagueño de 22 años, intentó mediar en una pelea que se produjo en los alrededores de un bar cuando celebraba su cumpleaños.

Allí recibió varios golpes que le ocasionaron una hemorragia cerebral que le costó la vida. Sus amigos no creyeron que los fuertes fueran tan graves por lo que intentaron reanimarle sin éxito.

Las cámaras de seguridad de la discoteca sirvieron a la Policía para identificar a los dos posibles agresores, uno que fue detenido y otro que se ha entregado en la comisaría. Ambos están detenidos a la espera de pasar a disposición judicial.