Marta Calvo
En Valencia, continúa el juicio contra el presunto asesino de Marta Calvo. En esta jornada han testificado 3 víctimas que sobrevivieron a sus encuentros con el acusado.
Tres víctimas que lograron sobrevivir al, presunto, asesino de Marta Calvo han testificado en la novena jornada del juicio.
Según publica levante-emv a dos de estas tres mujeres, todas ellas en situación de prostitución, las citó en Manuel, la casa alquilada a nombre de su madre donde el acusado confesó que descuartizó a Marta Calvo.
Las tres víctimas han relatado sus vivencias con Jorge Ignacio P. J. y en todos sus testimonios se aprecian claras similitudes como la forma en la que les introducía sin su consentimiento piedras de cocaína en los genitales.
La primera en declarar fue una joven que se encontró con el acusado solo 15 días después de que apareciese el cadáver de Lady Marcela. Asegura que al poco tiempo de dar dos sorbos a una copa de champán comenzó a encontrarse mal y se lo comentó a Jorge Ignacio P.J.
"Me costaba abrir los ojos. Cuando los abrí, estaba él encima, y fue un acto reflejo, puse las dos manos y lo aparté. No me encontraba nada bien. Le dije que necesitaba ir al baño a hacer pipí, fui y no noté que yo hacía pipí. Y dije, 'Vale, aquí no va bien algo'. Me puse en cuclillas me metí el dedo y saqué una bola", narró en la sala visiblemente nerviosa.
Entonces se dio una ducha y logró sacar otra bola. Asegura que no denunció "por vergüenza, por miedo." Jorge Ignacio P.J. volvió a intentar ponerse en contacto con ella pero no volvieron a verse.
La segunda joven se vio presuntamente con el acusado en una casa en Valencia. "Te quiero meter drogas por la vagina, por el ano" dice que llegó a proponerle. Las testigo asegura que se negó a tal proposición, pro que cuando se dio cuenta ya se encontraba en una sensación muy extraña. Recuerda: "No podía levantar las manos, era como una gelatina, él me ponía drogas debajo de las axilas, detrás de la rodilla, y luego me besaba. No sé cuánta cantidad me metió por la vagina y el ano. Estaba consciente y luego inconsciente" y añade: "Pensé que si cerraba los ojos me iba a morir".
La última mujer en testificar también estuvo en la casa de Manuel y relata que "se desmayó" al tomarse la segunda copa de vino y que después se despertó "muy asustada".
"Cuando desperté empecé a fijarme que toda la cama estaba llena de cocaína, desde la parte de abajo hasta las almohadas, todo lleno. Él intentaba tocarme e introducirme cocaína, le dije que no, y le dije que no me tocara ni se acercara". Asegura que al verlo por televisión en relación al caso de Marta Calvo lo reconoció.