Tren de Bejís
La actuación de la maquinista fue clave para lograr escapar de las llamas y recoger a los pasajeros que habían escapado. Estos son los nuevos detalles que se conocen.
Una mezcla de caos y pánico es la que se vivió en el tren de Bejís, atrapado entre las llamas durante más de 21 minutos. La maquinista del convoy tuvo que retroceder hasta Caudiel, pero el proceso se retrasó cuando los viajeros activaron el sistema de emergencia.
Varias personas abandonaron el convoy. Diez de ellas quedaron heridas leves y otras tres graves. Las investigaciones avanzan para descubrir por qué se tardó tanto en solucionar el problema y, poco a poco, vamos conociendo más detalles.
Atrapados durante 21 minutos
El tren salió de Valencia y se detuvo, exactamente, a las 17:54 horas, momento en el que se topa con el incendio forestal, el cual le impide avanzar. En total, estuvo hasta 21 minutos parado entre las llamas, aumentando la angustia entre los pasajeros.
Finalmente, a las 18:15 horas logró reanudar la marcha y, cinco minutos más tarde, a las 18:20 horas, es cuando Adifrecibe la notificación de peligro y pide cortar ese tramo. Los viajeros fueron atendidos a su llegada a Caudiel a las 18:39 horas.
En los últimos días, ha habido mucho misterio alrededor de la maquinista y si obró o no de manera correcta, ya que algunos de los testigos afirmaban quefue ella quien pidió a los pasajeros que se bajasendel tren.
El caos se apodera del tren
La declaración de la maquinista ante la Guardia Civil coincide con la información de las cajas negras. Ella no abrió las puertas del tren. Tal y como se puede apreciar en las imágenes, comunica a los pasajeros que no puede retroceder hasta que reciba la autorización.
Todo apunta a que alguien accionó el freno de emergencia, por lo que la maquinista tuvo que desactivarlo de manera manual.
Mientras tanto, el pánico se apoderó de uno de los vagones. Varios niños gritando, pidiendo que fuera "rápido", mientras que otras personas trataron de romper los cristales para salir de allí. El viento soplaba en dirección al tren, por lo que reventar las ventanas suponía exponerse al humo.
Sin embargo, la maquinista supo mantener la calma, tal y como aseguran los testigos, y trató de manejar la situación en varios puntos.
Cuatro personas continúan hospitalizadas
Aun así, otra mujer comenzó a animar a varios viajeros para que salieran del tren. Algunos, tras confundirla con la maquinista, hicieron caso a sus indicaciones y lograron huir del convoy. En total escapó una veintena de personas y diez de ellas acabaron con heridas leves y otras tres graves.
En estos momentos, quedan todavía cuatro hospitalizadas, dos aún en estado grave. Más tarde, con el tren ya en marcha, la maquinista los recogió y fueron atendidos en la estación de Caudiel, donde les esperaban los servicios de emergencia. El tramo de víacontinúa cerrado por precaución.