Málaga
Las víctimas permanecieron maniatadas y recibieron golpes y amenazas, sin poder comer ni medicarse. Uno de los secuestrados estuvo a punto de morir a causa de un coma diabético.
La Policía Nacional ha rescatado a cuatro hombres que estaban secuestradas en un piso de la localidad malagueña de Marbella. Sus captores los habían retenido y sometido a torturas en aquella vivienda para que confesaran dónde habían metido un alijo de 1.500 kilos de hachís que, supuestamente, les habían robado. En total, quince personas han sido detenidas en esta operación por su presunta implicación en los hechos.
Cuatro secuestrados torturados y en condiciones extremas
Uno de los secuestrados estuvo a punto de morir a causa de un coma diabético. Las víctimas permanecieron maniatadas y recibieron golpes y amenazas, además de que estuvieron sin comer o medicarse "para llevarlos a una situación límite, al fin de que facilitasen información acerca del destino de la droga", han informado desde la Policía.
Los agentes llevaron a cabo una importante operación en la que se realizaron hasta seis registros en las localidades malagueñas de Marbella, Benahavís y Estepona. Así, se ha requisado droga, una pistola, munición, pasamontañas, 50.000 euros envasados al vacío, varios vehículos y placas falsas, entre otras cosas.
Las víctimas fueron secuestradas el pasado 2 de diciembre, cuando fueron sorprendidas por un grupo de entre seis y ocho personas armadas, y llevadas al domicilio de uno de los detenidos. Los captores contactaron con sus seres queridos para pedir un rescate a cambio de cinco millones de euros.
Se han producido quince detenciones
La Policía tuvo conocimiento de lo ocurrido dos días más tarde del secuestro, cuando recibieron cuatro denuncias por desaparición, las cuales fueron enmarcadas en el mismo caso rápidamente. Finalmente, una semana más tarde, dieron con el paradero de los desparecidos, liberándolos y deteniendo a sus captores.
Concretamente, trece de los quince arrestos se produjeron en la provincia de Málaga, mientras que los dos restantes fueron en Granada. Todos ellos están siendo investigados por su posible participación en los delitos de secuestro, pertenencia a organización criminal, tenencia ilícita de armas, robo con violencia, robo de vehículo, falsedad documental y lesiones.