Coronavirus
El coronavirus lleva con nosotros desde finales de diciembre, desde entonces hemos visto ciento experimentos para visualizar cuantas gotas de saliva expulsamos al toser, estornudar o hablar. En la última prueba de laboratorio, en Estados Unidos, han medido cuánto tiempo aguantan en el aire esas partículas contaminadas por coronavirus. Calculan que se quedan unos 11 minutos de media flotando en un espacio cerrado. Pero los autores del estudio aseguran que aun hay que probarlo en situaciones reales
También sabemos que la nariz es la principal puerta de entrada, pero en Hong Kong han concluido que no es la única, y que este coronavirus infecta hasta 100 veces más que los anteriores conocidos hasta ahora. Y lo hace no sólo en las vías respiratorias, sino también, advierten, por los ojos.
La meta en esa carrera está más cerca, la Universidad de Oxford ha anunciado pasos muy importantes: han tenido éxito en las pruebas que están haciendo con monos. Los que recibieron la inyección, han generado anticuerpos en menos de 14 días, y con ellos se han protegido de dosis mayores del virus. El siguiente paso es ver si ocurre lo mismo en humanos.
Otros animales son vitales en esta lucha: los perros. Unos Labradores y Coker Spaniel van a demostrar si pueden oler el virus, sobre todo en personas asintomáticas, antes incluso de que infecten a otros. Han terminado su entrenamiento en el Reino Unido, y llega la hora de probar su eficacia.