SE HA PROBADO CON ÉXITO
Investigadores estadounidenses del Hospital Pediátrico de Filadelfia (CHOP) han diseñado un útero artificial para aumentar la supervivencia de los bebés prematuros extremos imitando el ambiente de la placenta con su líquido amniótico. El aparato, presentado en la revista científica Nature Communications, se ha probado ya en ovejas y permite que se complete con éxito el desarrollo de sus pulmones y de otros órganos.
Se trata de una mejora sustancial de las actuales incubadoras, lo que podría ayudar a salvar miles de vidas de niños prematuros. La bolsa va rellena de líquido y está conectada a diversas vías y tubos, entre los que se encuentra un cordón umbilical artificial.
En opinión de Alan W. Flake, cirujano fetal y director del Centro de Investigación Fetal en el Centro para el Diagnóstico y Tratamiento Fetal en el Hospital Infantil de Filadelfia, este sistema "podría prevenir la morbilidad severa sufrida por los bebés extremadamente prematuros potencialmente ofreciendo una tecnología médica que no existe actualmente".