ENTREVISTA EN ANTENA 3 NOTICIAS
Cada año se detectan en España 40.000 nuevos casos de alzhéimer, pero en ocasiones estos diagnósticos son erróneos porque se confunde con otra dolencia.
El catedrático de medicina genómica Ramón Cacabelos, explica en una entrevista en Antena 3 Noticias que se diagnostican casos de demencia como si fueran alzhéimer porque esta enfermedad es "la principal causa de demencia y representa el aproximadamente el 50% de los casos" aunque subraya que "existen otras muchas formas de demencia que cursan con síntomas similares".
Por ello, considera que "lo importante es saber que a partir de los 70-75 años casi todos los casos son mixtos".
También subraya la importancia de saber que "hay un 10-15% de casos de demencia que son detectables, previsibles y curables, sobre todos los relacionados con problemas metabólicos y por lo tanto es importante la precisión diagnóstica".
Respecto al tratamiento para curar el alzhéimer, que en los últimos 20 años casi no ha sufrido ningún avance, Cacabelos explica que los cuatro medicamentos que hay en el mercado se desarrollaron entre 1990 y 2005, momento en el que se creía que el alzhéimer era el responsable del deterioro de la memoria.
Sin embargo, continúa, "hoy se sabe que el alzhéimer es la muerte prematura de las neuronas, por lo tanto el cambio del paradigma tiene que producirse ya y pasar de este tipo de tratamientos sintomáticos a tratamientos neuroprotectores".
En cuanto al componente genético, el catedrático cuenta que tiene un gran peso porque "existen 600 genes distribuidos en el genoma humano cuyos defectos están asociados con la muerte prematura de las neuronas" y algunos de ellos son muy penetrantes, pero cree que la prevalencia real no es tan alta.
Por ello considera imprescindible "desarrollar planes preventivos que detecten precozmente a estas personas con importante riesgo genético" porque aunque la demencia comience a dar síntomas a partir de los 60 años, "realmente está destruyendo nuestro cerebro desde que este deja de madurar sobre los 30 años, por lo que tenemos tres décadas para detectar la enfermedad".
Cacabelos cree que si el tratamiento comienza a aplicarse una vez que se dan los síntomas, entonces ya llega tarde porque el objetivo es evitar que las neuronas mueran.