ALERTA DE BRUSELAS
Se conoce como el "timo del pescado". Si en un menú del día se elige lenguado o merluza es muy probable que lo que coma después sea otra cosa. Una inspección de un laboratorio vasco en 300 restaurantes ha revelado que casi nunca sirven el pescado que aparece en la carta.
Nos sentamos a comer. Pedimos el menú del día que de media cuesta unos diez euros y, muchas veces, ese bocado no es precisamente lo que hemos elegido en la carta. La lubina se va de precio, una salvaje vale unos 24 euros. Así que, en muchas ocasiones, nos dan gato por liebre, un cambiazo en toda regla. "No se compran los peces enteros, muchas veces se compran raciones, sin piel, y así se facilita la sustitución de un tipo por otro", nos explican.
Para desenmascarar el 'cambiazo' han hecho pruebas en un laboratorio. El estudio lo encargó Bruselas y se han tomado muestras en restaurantes de todo el país. Estos son los resultados: el cambio de tipo de pescado solicitado afecta al 83 por ciento de las muestras de lenguado, más del 70 por ciento de la merluza y un 50 en atún rojo. Los casos aumentan cuanto más barato es el menú.
No hay riesgos para la salud pero sí para el bolsillo. Es un fraude no sólo para el consumidor, sino también para el restaurante. El timo es muy lucrativo. Sólo un ejemplo y hagan cuentas: el kilo de la merluza del Cantábrico vale 20 euros y la merluza de Namibia o Chile, ronda los dos euros.