Virus y bacterias
Es la bacteria causante de las amigdalitis y la escarlatina. La falta de exposición durante la pandemia podría ser la razón del aumento de casos.
La bacteria estreptococo del grupo A ha causado la alerta sanitaria en Reino Unido. En los últimos tres meses, ha acabado con la vida de hasta seis menores de edad, según datos de la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido (UKHSA): el 2 de diciembre se publicaron las últimas cifras oficiales, que indican que cinco niños murieron en Inglaterra y otra niña en Gales.
Además, en las islas británicas, estos últimos meses, se están registrando más casos de lo habitual: 851 casos en la semana 46 respecto a un promedio de 186 en los años anteriores.
¿Puede afectar a España?
En este contexto, surgen las dudas y se incrementa la preocupación por la situación en nuestro país: ¿Podrían estar aumentando los casos también en España? Francisco Javier Membrillo, portavoz de la Sociedad de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC), llama a la calma y descarta que estemos ante una nueva epidemia, al menos, de momento.
Desde el pasado 19 de octubre hasta la fecha se han detectado 16 casos en menores con edades entre 1 y 12 años. De ellos, dos niñas han fallecido en Madrid al presentar un cuadro clínico de evolución muy severa cuando llegaron a Urgencias. En cuanto al resto de casos, 14 de los diagnosticados están ingresados con el correspondiente tratamiento antibiótico mientras evolucionan de forma favorable.
Ente estos casos conocidos, los pediatras explican que los datos se corresponden con los parámetros normales en cuanto a la enfermedad y han querido rebajar el estado de alarma: aunque existe preocupación, no se ha activado una alerta similar a la de Reino Unido.
Una situación excepcional
El fallecimiento de esos niños, asegura, se trata de algo excepcional. Es una enfermedad que, por lo general, no desarrolla nuevas variantes ni cepas, por lo que no debemos alarmarnos ni cambiar la forma en la que se aborda.
Estamos viendo más casos de otras enfermedades víricas, como la bronquiolitis, en una población que en los últimos dos años ha estado menos expuesta a virus y bacterias por las medidas propias de la Covid-19. Ahora, con la vuelta a la normalidad, nuestro organismo es más vulnerable ante una exposición brusca a todos los virus y bacterias que circulan por el entorno. Además, en España, de momento, no hay datos oficiales que demuestren un claro aumento de casos.
Aún no se sabe si hay que hablar de la existencia de una epidemia
La bacteria estreptococo no es nueva. Por lo general, en los niños se presenta y cursa levemente. Pueden afectarles de forma respiratoria, dando lugar a la amigdalitis, una de las enfermedades más típicas cuando llega el frío; o cutánea, la escarlatina. Aunque sean enfermedades leves, son altamente contagiosas en los pequeños.
¿Cómo podemos identificar la enfermedad?
Para identificarla, los síntomas más comunes son la fiebre persistente, la somnolencia, y las alteraciones del nivel de la consciencia. Además, se les ponen los labios, las palmas de las manos y las plantas de los pies de color azul. En cualquiera de estos casos, la recomendación de los expertos es la de ir al médico cuanto antes para llevar a cabo las pruebas correspondientes que detecten la enfermedad.
Para evitar el contagio, las medidas que debemos mantener son las habituales: evitar la exposición en entornos sociales, familiares y escolares de niños que cursen una de estas patologías.