Dismorfia del selfie
Los filtros en las redes sociales han distorsionado la forma en la que muchos usuarios se ven. Así funciona la dismorfia del selfie.
Las redes sociales llegaron con los filtros, las herramientas de edición fotográfica que pueden cambiar la apariencia de cualquier usuario. Su auge en los últimos años tiene un impacto en la salud mental. Este fenómeno se conoce como dismorfia del selfie.
Para poder definir qué es hay que diferenciarla de la dismorfia corporal. Se trata de un trastorno de la propia imagen en la que no se puede dejar de pensar en uno o más defectos en la apariencia. La dismorfia del selfie es un tipo de dismorfia corporal que se basa en un trastorno sobre la obsesión por compararse con imágenes retocadas o distorsionadas por filtros de las redes sociales. La mayoría de los afectados suelen ser adolescentes y las redes forman un papel importante.
Este tipo de filtros pueden llegar a cambiar la apariencia del usuario al incluir maquillaje, pecas, el color del pelo o de los ojos. Las personas se acostumbran a usar este tipo de efectos para verse más atractivas y con el tiempo dejan de gustarse a sí mismos. Crean ilusión que no se corresponde a la realidad. Asimismo, suelen encontrarse en redes como TikTok o Instagram y pueden también modificar otros rasgos faciales como los ojos o la cara.
'The Wall Street Journal' reveló la existencia de un informe interno de Meta que señalaba el impacto negativo que las comparaciones podían tener entre los usuarios adolescentes en Instagram. El informe mostraba que el "32% de las chicas adolescentes dijo que cuando se sentían mal con sus cuerpos, Instagram les hizo sentirse peor".
La situación puede llegar a provocar que en ocasiones las personas afectadas por este trastorno acudan a un cirujano para realizarse retoques estéticos.
Según un estudio de la Universidad de Oxford (Core Clinical Feautures of Body Dysmorphic Disorder) este trastorno suele manifestarse, como norma general, de diferentes formas en función del género.
En el caso de las mujeres, las áreas que más preocupan son:
En el caso de los hombres, las partes en las que más se centran son:
Este tipo de inseguridades puede llegar a desembocar en una frustración. La dismorfia del selfie puede tener varias conductas a nivel general como la necesidad de camuflaje, la comparación de uno mismo con los demás, la conducta de verificación o de mirarse insistentemente en el espejo, el aseo excesivo o una baja autoestima.