CON EL FIN DE CURSO LLEGAN LAS NOTAS
José Antonio quiere saber si sus bajos resultados escolares obedecen a un problema de visión. Unas gafas especiales comprueban si los ojos se mueven correctamente al leer. Es una de las habilidades oculares que no se revisan en un control rutinario y que son imprescindibles para entender y asimilar contenidos.
Según María García Montero, optometrista, "hay muchos niños que pueden presentar algún tipo de problema o alteración o dificultad en el proceso de aprendizaje, porque tienen una falta de habilidad o una habilidad visual defectuosa". Es fundamental un examen en profundidad si las notas no son aceptables. Pero como el ojo del niño es muy elástico y puede engañar, hay que dilatarlo.
La Profesora en Óptica Fisiológica de la Facultad de Óptica de la Universidad Complutense de Madrid, Celia Sánchez-Ramos, recomienda dilatar la pulila para que los músculos que sujetan el cristalino se relajen. "De esa manera se puede ver cómo es el sistema óptico en relación a la longitud del ojo sin que el niño tenga opción de forzar la visión" apunta Sánchez-Ramos. Una vez que el problema ha sido detectado, hay ténicas que pueden ayudar a solventar el problema.
Es el caso del Syntonic que puede corregir la falta de pericia del ojo infantil. La Doctora en Optometría Marta Cabranes asegura que "los niños que tienen problemas, mejoran el campo visual y por tanto mejoran las habilidades que pueden influir en el aprendizaje. Conseguimos que el niño mejore en los percentiles, por ejemplo, en la lectura". Los problemas de visión son la causa de uno de cada tres casos de fracaso escolar.