Coronavirus
Elena Vanessa Martínez señala que este posible escenario estará sujeto no al número de contagios sino a la gravedad de los mismos
No se puede descartar que, en un futuro próximo, el uso de la mascarilla en interiores vuelva a ser obligatorio. Esa es la principal idea que Elena Vanessa Martínez, presidenta de la Sociedad Española de Epidemiología, ha querido trasladar en su entrevista en el informativo matinal de Antena 3 Noticias.
Después de que el Gobierno diese luz verde a que el cubrebocas dejase de ser obligatorio en espacios cerrados -a excepción hecha de hospitales, centros de salud, farmacias o residencia de ancianos- son muchos los expertos que advierten que la vuelta de esta medida de protección sanitaria podría ser una realidad más pronto que tarde. Es lo que ya piden, de hecho, algunas comunidades autónomas como Asturias ante el incremento de los contagios desde principios de abril.
"No es una opción que podamos descargar", relata Martínez. "En la propia estrategia de vigilancia está contemplado que, en caso de que la transmisión empeore, podríamos volver a hacer obligatorio el uso de la mascarilla en interiores.
La presión hospitalaria, clave
La presidenta de la Sociedad Española de Epidemiología, en cualquier caso, relaciona esta posibilidad no tanto con el incremento de contagios -toda vez que, tarde o temprano, la mayoría de españoles se habrá contagiado- sino la gravedad de los mismos. Es decir, la presión hospitalaria.
En ese sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) denuncia que cada vez es más difícil realizar la trazabilidad del virus porque los países llevan a cabo cada vez menos test PCR para detectar el coronavirus, y todo queda sujeto, prácticamente, a los datos hospitalarios y, en menor medida, a la incidencia acumulada de contagios por cada 100.000 entre los mayores de 60 años.
En España, los datos hablan por sí solos: la curva epidemiológica de la covid muestra nuevamente signos de avance casi una semana después de levantarse el uso de las mascarillas, con un aumento de la incidencia entre los mayores de 60 años hasta los 608 casos (108 puntos más en una semana) y un crecimiento de la trasmisión que ha ido caballo con una leve subida de la ocupación hospitalaria, principalmente en planta, que pasa del 5 %.