Salud
Fue una medida por la que se optó en 1988 para mejorar la salud bucodental de los niños vascos y que ahora, según los últimos estudios, carece de sentido para el Gobierno autonómico.
Quizá es un dato que muchos desconozcan porque lleva sucediendo más de 30 años en el País Vasco y pasa desapercibido. Algo tan cotidiano como el agua corriente de las casas o de los espacios públicos de Euskadi viene acompañada de flúor. La fluoración fue una medida que se implantó en progresivamente en los diferentes territorios de la comunidad para que la salud bucodental de los más pequeños mejorase. Ahora, a la vista de la mejora, el Gobierno autonómico quiere eliminar la normativa pese a que los expertos no compartan la decisión, tal y como ha podido saber Antena 3 Noticias.
Todo empezó cuando en 1988 se demostró que los niños de 14 años tenían serios problemas bucodentales. En aquel momento, de media, tenían hasta cuatro caries. Con la ayuda de los expertos, Euskadi impulsó dos medidas para mejorar la salud bucodental: un plan de salud bucodental y la fluoración de las aguas.
Sin embargo, esta prevención podría darse por finalizada de un momento a otro al haberse comprobado que la media de caries entre menores ha descendido en los últimos años al 0,5 alegando que ya no es una medida necesaria.
Los expertos no están de acuerdo
A falta de conocer más detalles de la derogación de ley, desde el Colegio Oficial de Odontólogos de Gipuzkoa aseguran, en declaraciones a este medio, que "mantener el flúor en las aguas corrientes es una medida preventiva" y que actualmente sigue ayudando a mejorar la salud dental de los ciudadanos, especialmente de los niños.
Además, el presidente del Colegio de Odontólogos, José Francisco Navajas, añade que la fluoración del agua es una "manera democrática de repartir salud dental sin importar el estatus socioeconómico de la población", por lo que de eliminarse, les gustaría que el Gobierno vasco diese unos motivos "claros y fundamentados", algo que por el momento no se ha hecho público.
No hay estudios que demuestren que sea dañino
Pese a la controversia que pueda suscitar esta medida, "no hay estudios conocidos que demuestren que la fluoración de las aguas es dañino para la salud", insiste Navajas. Todo lo que existe, o al menos conocen, es una evolución favorable. "Por haber añadido flúor a las aguas tenemos uno de los mejores índices CAOD (número de dientes cariados, ausentes y obturados dividido por el total de individuos) de Europa", explica el odontólogo.
No obstante, el gobierno del País Vasco, apoyándose en otra serie de estudios, alude que los dentífricos ya vienen acompañados de flúor y de lo que se trata es de educar mejor en ese tipo de salud: lavarse más y mejor los dientes para evitar las caries.
Eliminación progresiva del flúor de las aguas en Euskadi
A lo largo de los últimos años, Euskadi ha ido rebajando los niveles de fluoración de las aguas: del 1,1 microgramos iniciales a los 0,7 por litro en el agua de consumo de las zonas de abastecimiento que sirven a poblaciones con más de 30.000 habitantes. Eso es, por ejemplo, casi un 71% de la población guipuzcoana.
Y la normativa también se ha ido eliminando por completo en varios puntos del País Vasco dependientes de las principales entidades gestoras del abastecimiento de agua en la comunidad. El pasado mes de enero dio el paso Aguas del Añarbe. Antes lo hicieron el Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia, Aguas Municipales de Vitoria-Gasteiz (Amvisa), el Consorcio de Aguas de Gipuzkoa o Servicios de Txingudi.
Desde estas empresas aseguran que, aunque la "fluoración del agua ha permitido, junto a otras medidas, la mejora de la salud bucodental de la población infantil, también ha sido una medida controvertida que ha llevado a su eliminación en muchos países europeos", por eso se suman a ello.