UN 80% MÁS PEQUEÑO QUE LOS HABITUALES
Doce hospitales españoles han inyectado a doce pacientes unos pequeños dispositivos debajo de su piel, en la parte izquierda del pecho. Son monitores cardiacos un 80 % más pequeños que los habituales y que monitorizan el ritmo del corazón. Se utilizan para personas que han sufrido un síndrome cardiaco y se desconoce la causa.
Es lo que le pasa a Hugo, al que dos o tres veces al año su corazón le da un susto. A sus seis años, es el paciente más pequeño al que se le ha implantado. Lo llevará durante tres años en los que se recopilará información que llega al especialista.
Este nuevo dispositivo es un 80% más pequeño que los dispositivos que se implantaban hasta ahora, sin cables. La mayor parte de los pacientes que lo llevan ahora apenas lo notan.
Gracias a este dispositivo, tras su operación, Hugo podrá llevar una vida totalmente normal. Tan normal, que ya no para quieto en la cama.