El cambio de hora nos ha privado de una hora de sueño. Poca cosa, para la mayoría, pero lo cierto es que el insomnio tiene serias consecuencias.

La privación de sueño tiene efectos físicos en el organismo. Nos produce sensación de cansancio, somnolencia, alteración sobre la capacidad de ánimo y de rendimiento.

Tiene claros efectos sobre la memoria y sobre la atención. Pero lo que no se conocía hasta ahora es que también afecta a la toma de decisiones. Quien ha dormido poco tiende a decidirse por la opción más arriesgada.

En el mundo de la política, se toman con cierta frecuencia decisiones importantes tras muchas horas de privación de sueño. En ese escenario la visión de los riesgos no es nada clara.

Existen profesiones en las que la toma rápida de decisiones está asociada a situaciones de estrés y con ello de falta de sueño. Los medicos en servicios de urgencia o los conductores profesionales son dos ejemplos.

Recuerden, la falta de sueño potencia las decisiones arriesgadas por un exceso de optimismo.

Más sobre este tema: