Sibo
Los médicos advierten de la nula validez de estas pruebas de SIBO que se pueden comprar por internet.
Los médicos de atención primaria denuncian que los jóvenes acuden cada vez más a sus consultas diciendo que tienen SIBO, un crecimiento desmesurado de bacterias en el intestino y que se lo han autodetectado porque se han hecho un test en internet.
El SIBO es el sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado y consiste en la presencia anormal de bacterias en el intestino delgado que deriva en la presencia de síntomas como gran cantidad de gases, dolor de estómago o estreñimiento, entre otras. Las pruebas que se adquieren por internet para autodetectar esta enfermedad no son fiables, según los expertos. Y es que los test fiables pueden costar hasta 500 euros; basta con hacer una búsqueda en internet para encontrar cualquiera de estos test, que en muchas ocasiones se ofertan desde las páginas web de laboratorios y clínicas privadas.
Los signos y síntomas de crecimiento excesivo de bacterias en el intestino delgado a menudo incluyen:
En caso de sufrir diarrea persistente o pérdida de peso rápida e involuntaria se recomienda consultar a un médico para realizar una evaluación completa, especialmente si se ha tenido una cirugía abdominal.
Las causas pueden ser varias, entre ellas complicaciones de la cirugía abdominal, incluido el bypass gástrico para la obesidad y la gastrectomía para tratar las úlceras pépticas. También problemas estructurales dentro y alrededor del intestino delgado, incluido tejido cicatricial que pueden envolver el exterior del intestino delgado y bolsas abultadas de tejido que sobresalen a través de la pared del intestino delgado. Y ciertas afecciones médicas, incluidas la enfermedad de Crohn.
Los factores que aumentan el riesgo de crecimiento excesivo de bacterias en el intestino delgado incluyen: cirugía gástrica para tratar la obesidad o las úlceras, un defecto estructural en el intestino delgado, una lesión en el intestino delgado, la enfermedad de Crohn, linfoma intestinal o esclerodermia, antecedentes de radioterapia en el abdomen o diabetes.
Para diagnosticar el SIBO es posible que te hagan pruebas para comprobar si hay un sobrecrecimiento bacteriano en el intestino. Las pruebas comunes incluyen: prueba de aliento, que se trata de una prueba no invasiva que mide la cantidad de hidrógeno o metano que se exhala después de beber una mezcla de glucosa y agua o aspirado del intestino delgado y cultivo de líquidos, donde los médicos pasan un tubo largo y flexible por la garganta a través del tubo digestivo superior hasta llegar al intestino delgado.
Además de estos exámenes, el médico puede recomendarte un análisis de sangre para buscar la deficiencia de vitaminas o una evaluación de las heces para comprobar la malabsorción de grasa.
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