SEGÚN LA UNIVERSIDAD DE TEXAS

Un estudio desvela que los refrescos light causan un severo aumento del perímetro de la cintura

La Universidad de Texas ha llevado a cabo un estudio durante casi una década en el que se demostraría que aquellos que beben bebidas gaseosas light sufren un aumento en la cintura a lo largo de los años casi tres veces mayor a quienes no consumen estas bebidas. Esta incidencia se produce especialmente en los mayores de 65 años.

Un estudio de la Universidad de Texas ha demostrado que el consumo de bebidas gaseosas endulzadas artificialmente tienen un efecto radical en la cintura y triplican el perímetro de ésta.

La investigación explica que en los últimos 30 años, el uso de edulcorantes artificiales y la ingesta de bebidas light con gas han aumentado en nuestra comida diaria, y con ello la obesidad también se ha incrementado.

Un estudio de 2014 publicado en la revista 'Nature' sugiere que las bebidas light pueden causar un aumento de peso debido a los edulcorantes artificiales que alteran las bacterias intestinales naturales del cuerpo, tal y como explica el diario británico Metro.

El autor principal del estudio, Sharon Fowler, de la Universidad de Texas Health Science Center, ha asegurado que "el estudio demuestra que aumentar el consumo de refrescos light se asocia con el aumento de la besidad abdominal".

El estudio se centró en 749 adultos, la mayoría superaban los 65 años, y se midió las bebidas light que bebían, el tamaño de la cintura y el peso que tenían en tres reuniones de seguimiento durante más de una década.

La investigación explica que quienes tomaron refrescos light tuvieron un aumento en la circunferencia de su cintura de casi el triple que quienes no consumieron.

Los investigadores escriben que vieron "la circunferencia de la cintura aumentada en 0,80 pulgadas para los no consumidores, 1,83 pulgadas para los ocasionales, y en 3,16 pulgadas para los consumidores diarios durante el período de seguimiento, de 9,4 años".

Para concluir, los autores del estudio recomiendan que las personas mayores traten de frenar el consumo de bebidas endulzadas artificialmente.

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