Dietas saludables
Las dos dietas reinan en nuestras cocinas y forman parte de nuestra cultura gastronómica. Saber combinarlas puede ser nuestro elixir de juventud y bienestar.
Nuestra gastronomía goza de prestigio y no es para menos, porque tenemos productos a los que les sacamos el mejor partido. Dos dietas, la atlántica y la mediterránea reinan en nuestras cocinas. Comer saludable está al alcance de nuestra mano. De hecho, nuestros platos más típicos sirven de ejemplo para muchos países que se esfuerzan en mejorar su cultura gastronómica.
Pero, ¿qué diferencias hay entre una y otra dieta?, la nutricionista Ana Colomer nos despeja las dudas: "La dieta atlántica tiene un poder cardio saludable y además ayuda a controlar la obesidad y el sobrepeso. La dieta mediterránea es más variada y completa".
En Galicia, Carmen lleva 48 años regentando su restaurante, 'La Charca', donde se sirve marisco, pescado, verduras y otros alimentos que forman parte de la dieta atlántica. Ella nos cuenta con orgullo que todos sus productos son "frescos y naturales". "Cuando comemos lo más importante es la materia prima y nosotros la tenemos".
Al igual que Toni Montiliu, él es agricultor y tiene su propio restaurante en Valencia, y defiende a capa y a espada la dieta mediterránea: "Yo sirvo de la huerta a la mesa". Juan cultiva frutas y verduras, que tras la recogida, se las sirve a sus clientes.
Además destaca uno de los platos estrella en la Comunidad Valenciana: "La paella tiene todos los ingredientes importantes para la supervivencia de una persona."
"Ambas dietas son saludables, las dos son muy ricas en nutrientes, lo ideal es comer variado de forma equilibrada, y si todo ello se combina con ejercicio nuestra salud lo va a notar", apunta la nutricionista. Si analizamos los puntos que tienen en común destacamos que para ambas es importante el aceite de oliva, las legumbres, frutas y verduras. El pescado predomina en la dieta atlántica, pero también se da en la mediterránea.
La atlántica es más rica en proteínas por el mayor consumo de carne y productos de mar. Cierto es que el marisco tiende a elevar el colesterol y el ácido úrico, pero aporta minerales y antioxidantes.
En la dieta mediterránea se consumen más productos animales, aves, cerdo, ternera o cordero, también ocupan protagonismo especial los cereales, los huevos , el arroz y los frutos secos. Nuestra suerte es que a la hora de comer podemos elegir y optar por una u otra dieta, aunque lo ideal es combinar lo mejor de cada una de ellas.