Andalucía
El menor empezó a presentar síntomas a principios del mes de marzo, tras lo que tuvo que ingresar en un centro hospitalario.
En el municipio sevillano de Lebrija se ha detectado un caso de Fiebre del Nilo Occidental (FNO) en un menor de tan solo cinco años. El pequeño empezó a mostrar síntomas a principios del mes de marzo y ha estado ingresado durante diez días, tras lo que ya ha recibido el alta médica.
Por el momento, no hay evidencias que concluyan de manera clara la fecha en la que el menor pudo contagiarse, pero en la actualidad se encuentra en perfecto estado de salud en su domicilio, tal y como ha precisado la Consejería en un comunicado. Este es el primer caso que se ha confirmado en la provincia en lo que llevamos de primavera.
Tras conocerse este caso, Salud comenzó a realizar actuaciones ambientales junto a las autoridades municipales, tales como la búsqueda de mosquitos a través de trampeo en zonas cercanas a la vivienda del menor. Además, la Estación Biológica de Doñana-CSIC ha instalado ocho trampas para evaluar el estado de las poblaciones de mosquitos cercanas a su domicilio. Por el momento, todas las pruebas han dado negativo.
Además del caso del menor de cinco años de Lebrija, se ha informado al Ministerio de un segundo caso probable en un joven de 17 años de Dos Hermanas (Sevilla). Este también empezó a mostrar síntomas a principios del mes de marzo y ha estado permanecido ingresado durante 18 días.
Este joven de 17 años ya se encuentra en su domicilio con buen estado de salud. En esta ocasión, se llevan a cabo más estudios de laboratorio para confirmar la infección. El Servicio de Vigilancia de Salud Pública de Andalucía va a evaluar sobre los dos municipios, Dos Hermanas y Lebrija, el nivel de riesgo de cara a la próxima temporada de detección de Virus del Nilo Occidental.
Hasta el 31 de diciembre de 2023, al Sistema de Nacional de Vigilancia se han notificado 113 casos autóctonos. En estos casos, el mes de inicio de síntomas osciló entre junio (un caso probable) y noviembre (cuatro casos confirmados y un caso probable), registrando máximos en agosto (62 casos, entre confirmados y probables).
Entre tanto, se llevan a cabo investigaciones entomológicas. Sus resultados preliminares revelan mayores densidades de Culex pipiens respecto al mismo mes de años anteriores, sin detectarse el VNO en mosquitos hembra.
La vía para poder actuar "de forma rápida y enérgica" y evitar brotes pasa por mantener los programas de prevención y vigilancia sobre las poblaciones de mosquitos durante todo el año. Así lo precisa a EFE Rubén Bueno, entomólogo, biólogo y director técnico en la empresa Rentokil Initical, la cual está especializada en servicios de higiene y control de plagas. Advierte de que "debido al cambio climático, hay que acostumbrarse a que estas cosas van a ser habituales".
Según Bueno, la aparición del caso del menor de cinco años, el primero en la temporada, es "llamativa y bastante inusual", puesto que habitualmente los contagios se dan entre julio y octubre, que son los meses de más calor, con la peor época registrándose según avanza el verano.
"Es infrecuente pero no imposible, porque se están dando las condiciones climáticas para que esto suceda", ha explicado el experto, quien insiste en la necesidad de que los programas de vigilancia y control de los mosquitos se extiendan a lo largo de todo el año.
Rubén Bueno ha explicado que aunque durante el invierno se registre menor afluencia de mosquitos, su control en esa época va a permitir "llegar al verano con menor población", ya que se irá reduciendo "en el momento en el que son más vulnerables, que es cuando las temperaturas no son tan elevadas y se les puede controlar mejor".
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