Alimentación
La celiaquía afecta a entre el 1 y el 2% de la población, aunque se estima que la mayoría de los casos permanecen sin diagnosticar. Reconocer los síntomas y saber cómo identificarlos es crucial para una detección temprana y un tratamiento adecuado.
La celiaquía es una enfermedad autoinmune desencadenada por la ingesta de gluten en individuos genéticamente susceptibles. El gluten, una proteína presente en cereales como el trigo, la cebada y el centeno, desencadena una respuesta inmune que daña el revestimiento del intestino delgado. Esta lesión puede interferir con la absorción de nutrientes y provocar una variedad de síntomas, desde molestias abdominales hasta complicaciones a largo plazo.
1.Diarrea crónica: una de las señales más comunes de la enfermedad celíaca es la presencia de diarrea crónica, que puede ser grave y persistente. Las deposiciones suelen ser sueltas, acuosas y frecuentes.
2.Dolor abdominal: los dolores abdominales, que pueden variar desde leves hasta severos, son comunes en las personas con enfermedad celíaca. Este dolor puede ser intermitente o constante y generalmente se localiza en la parte baja del abdomen.
3.Distensión abdominal: la hinchazón abdominal es otro síntoma característico. Después de consumir alimentos que contienen gluten, muchas personas experimentan una sensación de hinchazón y plenitud en el abdomen.
4.Náuseas y vómitos: las personas con enfermedad celíaca a menudo experimentan náuseas y, en algunos casos, vómitos después de consumir gluten.
5.Fatiga: la fatiga crónica es un síntoma común de la enfermedad celíaca. Las personas pueden sentirse extremadamente cansadas, incluso después de descansar lo suficiente.
6.Pérdida de peso: la malabsorción de nutrientes puede provocar una pérdida de peso no intencional en personas con enfermedad celíaca, a pesar de tener un apetito normal o incluso aumentado.
7.Anemia: la deficiencia de hierro es común en la enfermedad celíaca debido a la malabsorción de nutrientes. Esto puede provocar anemia, que se manifiesta como fatiga, debilidad y palidez.
8.Erupciones cutáneas: la dermatitis herpetiforme es una erupción cutánea con picazón que afecta a algunas personas con enfermedad celíaca. Esta erupción suele aparecer en codos, rodillas, espalda o cuero cabelludo.
9.Problemas neurológicos: algunas personas con enfermedad celíaca experimentan síntomas neurológicos, como dolores de cabeza persistentes, entumecimiento u hormigueo en manos y pies, y problemas de equilibrio.
10.Problemas óseos: la malabsorción de calcio y vitamina D puede llevar a problemas óseos, como osteoporosis u osteopenia, que aumentan el riesgo de fracturas.
Estos son solo algunos de los síntomas que pueden indicar la presencia de enfermedad celíaca. Los síntomas pueden variar ampliamente de una persona a otra, y algunas personas pueden experimentar síntomas leves o incluso no tener síntomas en absoluto.
El diagnóstico de la celiaquía implica una combinación de pruebas serológicas y confirmación mediante biopsia intestinal. Las pruebas serológicas buscan anticuerpos específicos asociados con la enfermedad, como los anticuerpos anti-transglutaminasa tisular (tTGA) y los anticuerpos antiendomisio (EMA).
Si sospechas que puedes ser celíaco, es fundamental buscar ayuda médica especializada y seguir el protocolo de diagnóstico recomendado para recibir el tratamiento adecuado y mejorar tu calidad de vida.
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