España solidaria
Cada día nacen en España 10 niños con cardiopatías congénitas. Estas malformaciones del corazón suponen largos periodos de ingreso en hospitales. La fundación Menudos Corazones acompaña a estos pequeños pacientes y a sus familias en ese duro proceso.
Jonathan tiene cinco años y visita la sala 'Como en casa' muy a menudo. Y así le hacen sentir allí, como en su propia casa. Si un niño está feliz, contento y relajado, su corazón va mucho mejor.
Socializar es una de las tareas fundamentales para lograr la estabilidad emocional de estos pequeños. Para ello utilizan herramientas como la música, el arte o el juego educativo.
El objetivo es que manifiesten sus miedos e inquietudes. Expresar esas emociones, esos sentimientos, esas angustias, y todo lo que viven en su día a día de ingreso. Y así poder aliviar y disminuir la ansiedad que sufren en su día a día aquellos que se encuentran en la UCI pediátrica. Si le tienen que hacer una analítica o si tienen que prepararle para una cirugía.
El acompañamiento que realizan los voluntarios a diario es parte fundamental de la terapia de estos niños que, por su condición, requieren una atención particular. ¿El resultado? A corto, cortísimo plazo.
El beneficio psicológico que les da repercute en su beneficio fisiológico porque para corazones tan pequeños los latidos de solidaridad tienen que ser muy grandes.