Coronavirus
Crece la figura del 'corona-detective' en Europa. Su papel es esencial para localizar a los positivos de coronavirus y aislarlos. Países como Bélgica ya ha contratado a 2.000 'corona-detectives'.
En Alemania cuentan con 20 rastreadores por cada 100.000 habitantes. Otros países, como Singapur, recurren al 'big data' y a la vigilancia tecnológica. El objetivo es buscar a infectados investigando en redes sociales o vigilando las llegadas en los aeropuertos.
En el caso de España más de 2.000 personas, conocidos como rastreadores, están encargados de descubrir los posibles contagios provocados por un afectado por el virus. Su misión es evitar un rebrote de la pandemia.
Cantabria es uno de los ejemplos en los que estos 'corona-detectives' buscan a los positivos. Estos trabajan de lunes a domingo realizando llamadas a los nuevos contagios para saber quiénes han sido sus contactos durante la última semana. Sobre todo se buscan a aquellas personas con las que han tenido contacto durante más de 15 minutos, a menos de dos metros y sin mascarilla.