En España viven entre 140.000 y 170.000 personas con infección por el VIH, de las que casi una de cada cinco (18 %) no está diagnosticada, con lo que la detección, a día de hoy, sigue siendo tardía, como lo fueron en un 47,6 % de los nuevos casos en 2018, pese a que la prueba es gratuita y confidencial para todos.
La situación del VIH en España ha mejorado en los últimos diez años y los nuevos casos de infección han ido cayendo: los 3.244 nuevos diagnósticos en 2018 confirman ese descenso y también cuál es el actual perfil mayoritario, hombres (el 85,3 %) y las tasas más elevadas en el grupo entre 25 y 34 años.
Existen tres vías mediante las cuales se puede contagiar el virus del sida.
- La vía sexual. La vía sexual es el modo de transmisión principal en los nuevos diagnósticos y la transmisión entre hombres que tienen relaciones entre hombres (HSH) es la mayoritaria
- La vía sanguínea se puede dar al compartir cualquier material que haya estado en contacto con la sangre de una persona infectada y posteriormente entre en contacto con la sangre de una persona sana. El riesgo de transmisión del sida a través de las transfusiones de sangre actualmente es muy bajo.
- La vía vertical (madre-hijo). Si la madre es seropositiva se puede transmitir el virus durante el embarazo, el parto y la lactancia. Los casos de sida pediátricos y de transmisión materno-infantil disminuyeron drásticamente a partir de 1996 y en los últimos años se mantienen en niveles muy bajos.