SEGÚN UN ESTUDIO

Alertan del riesgo que supone la exposición de los niños al aire acondicionado de los coches

Un estudio señala que hay más contaminación del aire en el interior de un coche que fuera de él. Los científicos encargados de la investigación aconsejan ir a pie o en bicicleta a la escuela para evitar estar expuestos a peligrosos niveles de contaminación.

Un científico experto ha alertado del riesgo que supone la exposición de los niños al aire acondicionado de los coches debido a que los tóxicos del aire son a menudo mucho mayores en el interior de los vehículos que fuera de ellos. David King afirma que ir a pie o en bicicleta a la escuela sería mucho mejor para su salud, que así evitarían estar expuestos a peligrosos niveles de contaminación.

La contaminación del aire acondicionado daña los pulmones en desarrollo de los niños, pero la investigación también señala que perjudica la capacidad del niño para aprender en la escuela y que puede dañar su ADN. "Los niños sentados en el asiento trasero de los vehículos son propensos a estar expuestos a niveles peligrosos de contaminación del aire", asegura King en una entrevista al diario The Guardian.

"Se ha demostrado que los beneficios de ir andando o en bicicleta son muy superiores. Si más conductores supieran el daño que pueden estar haciendo a sus hijos, creo que se lo pensarían dos veces antes de entrar en el coche", considera el científico. Una serie de experimentos han demostrado que los conductores están expuestos a niveles mucho más altos de contaminación que aquellos que van a pie o en bicicleta por las mismas rutas urbanas.

Los niveles de dióxido de nitrógeno (NO2), emitida en su mayoría por los vehículos diesel, han estado por encima de los límites legales en casi el 90% de las zonas urbanas en el Reino Unido desde 2010. Se estima que los humos tóxicos causan 23.500 muertes prematuras al año y el problema se ha considerado como una emergencia de salud pública por un comité de todos los partidos de los parlamentarios.

"La contaminación del aire no se ha tomado en serio", dijo Holgate. "En mi opinión, es realmente grave que no hayamos empezado a tratar esto correctamente y poner en primer lugar la salud de niños y adultos", señala el profesor.

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