Alerta alimentaria
Unos helados de 13 marcas diferentes se están retirando de los supermercados por contener una peligrosa bacteria que podría causar graves problemas de salud.
La empresa Totally Cool está retirando de los supermercados estadounidenses hasta 60 productos de diversas marcas. Al parecer, los helados podrían estar contaminados con una bacteria conocida como "listeria".
Esta bacteria puede ser potencialmente peligrosa para los grupos vulnerables, como embarazadas, personas con problemas en el sistema inmune o niños.
Totally Cool ha estado distribuyendo estos productos a nivel nacional, tanto en tiendas minoristas, como a través de entrega directa. Desde la compañía alertan a los clientes que los hayan comprado a devolverlos de inmediato para recibir una devolución y proceder al desecho del producto.
Además, confirman que ya han paralizado la producción y distribución. Al parecer se dieron cuenta de que los productos presentaban esta bacteria gracias a un muestreo de la FDA, es decir, de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos.
«Totally Cool está retirando varias marcas de productos de helado debido a la posible contaminación con Listeria monocytogenes, un organismo que puede causar infecciones graves y a veces mortales en niños pequeños, personas frágiles o ancianas, y otras personas con sistemas inmunitarios debilitados», ha escrito la compañía en una publicación de la web de la FDA.
Consultando la etiqueta y viendo la fecha de caducidad, que oscila entre mayo de 2024 y diciembre de 2025, y lote del producto, se puede ver si se encuentra entre los afectados.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), aproximadamente 1.600 personas al año en Estados Unidos, enferman de listeriosis. De los cuales, 260 casos tienen consecuencias fatales.
La Listeria monocytogenes es una bacteria que se suele encontrar en alimentos contaminados y que puede provocar una enfermedad llamada listeriosis.
Esta enfermedad puede pasar totalmente desapercibida para los asintomáticos. Pero, en casos graves puede causar meningitis en fetos y bebés o dejar secuelas neurológicas. De hecho, las mujeres embarazadas son diez veces más propensas que otras personas a contraer esta infección.
Los síntomas suelen ser fiebre y problemas gastrointestinales y normalmente aparecen entre la primera y cuarta semana después de haber consumido el producto contaminado.
Los expertos recomiendan acudir al médico en caso de consumir un producto que contenga esta bacteria. El tratamiento recomendado suele contener antibióticos para entre cinco y diez días, en función de la gravedad del caso.
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