Guerra en Ucrania
El presidente ucraniano, recibido entre aplausos, ha condecorado a soldados que luchan en primera línea del frente.
Ya son más de 100 días de guerra en Ucrania y no parece que vaya a acabar pronto. Este domingo, las tropas de Vladimir Putin han vuelto a bombardear la capital, Kiev. Por otro lado, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, se desplazó al frente de guerra situado en la región del Donbás, muy cerca de Severodonetsk, la ciudad que está siendo más castigada por Rusia en estos momentos.
Zelenski, en el frente de guerra
Zelenski, en un "viaje de trabajo", visitó las regiones de Zaporiyia, Donetsk y Lugansk, donde resisten muchos soldados ucranianos ante las embestidas rusas. Tanto Donetsk como Lugansk forman parte del Donbás, la región en la que Putin está centrando sus esfuerzos.
Allí mantuvo reuniones con dirigentes de la administración estatal, de la policía local, del Servicio de Seguridad y algunos alcaldes de zonas que durante un tiempo fueron ocupadas por Moscú.
Además, ha condecorado a soldados que luchan en primera línea del frente de esa región. "Había mucho trabajo. Fue un día interminable. Estuve en Zaporiyia y expresé mi apoyo a nuestros militares y premié a los mejores. Escuché los informes castrenses" dice en uno de sus vídeos publicados en su página web.
Tras visitar Zaporiyia, se fue a la ciudad de Lysychansk, situada en Lugansk.
"Estoy orgulloso de todas las personas que he conocido, de todas las personas con las que he estrechado la mano, de todas las personas con las que he conectado y a las que he expresado mi apoyo. También nos trajimos algo de ellos. Es importante. Trajimos confianza y fuerza. Les deseo salud", aseguró tras la visita.
Zelenski también se reunió, en el centro de Ucrania, con habitantes de Mariúpol que habían logrado escapar antes de que el ejército ruso se hiciese con el control. "Cada familia tiene su propia historia. La mayoría estaban sin hombres. El esposo de alguien fue a la guerra; otro está en cautiverio; otro, desafortunadamente, murió. Una tragedia. Sin hogar, sin seres queridos. Pero debemos vivir para los niños. Verdaderos héroes que están entre nosotros", afirmó.