Guerra Rusia Ucrania
Volodímir Zelenski, de origen judío, le ha dicho a Israel que "cuando los nazis invadían Europa, no querían dejar nada de nosotros los judíos; ahora Rusia quiere hacer lo mismo con Ucrania".
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, continúa pidiendo ayuda a Occidente mientras el ejército ruso incrementa sus ataques en la guerra. El último país al que ha solicitado armas y que aumente las sanciones contra Moscú ha sido Israel, con quienes el mandatario ucraniano ha invocado la tragedia del Holocausto.
Zelenski, en una reunión telemática con el Gobierno israelí, ha comparado la situación de los judíos en Europa durante la Segunda Guerra Mundial con la que vive ahora la población judía, al tiempo que añadía que Vladimir Putin busca llevar a cabo en Europa "una solución final" como la emprendida por Adolf Hitler.
"Cuando los nazis invadían Europa, no querían dejar nada de nosotros los judíos; ahora Rusia quiere hacer lo mismo con Ucrania", ha asegurado Zelenski, de origen judío, cuando la guerra se acerca a su cuarta semana y Putin recrudece sus ataques sobre las principales ciudades del país, con un ultimátum dado a Mariúpol incluido.
Terminología nazi
"Escuchad qué dice el Kremlin, son las mismas palabras, la misma terminología que los nazis usaron contra vosotros. Es una tragedia", ha asegurado Zelenskiante 112 parlamentarios de los 120 que integran la Knéset (el Parlamento de Israel).
El presidente ucraniano ha reclamando a los legisladores israelíes que exijan al gobierno acciones más contundentes, como prestar asistencia militar a Ucrania -incluyendo munición y el eficaz sistema antimisiles Cúpula de Hierro- e imponer sanciones contra Rusia, algo que Israel aún no ha hecho para no arriesgar la delicada alianza geoestratégica que mantiene con el Kremlin en Siria.
"Estoy seguro de que compartís y sentís nuestro dolor. Por eso, no puedo explicar por qué a estas alturas aún tenemos que instar a países de todo el mundo a que nos presten ayuda", ha indicado Zelenski en el vigésimo quinto día de guerra en su país, con el cerco en Mariúpol como el episodio más cruento.
Zelenski, por último, ha insistido en que la invasión rusa de Ucrania no es una operación militar más, sino que es la peor guerra desde la II Guerra Mundial, ya que el "Ejército ruso está destruyendo maliciosamente Ucrania mientras el mundo entero está mirando".