Elecciones Europeas
Las urnas lanzan a Ursula Von der Leyen,hacia su reelección como presidenta de la Comisión Europea. Tras un coqueteo con la ultraderecha, ahora espera contar con el apoyo de socialdemócratas y liberales.
Úrsula Von der Leyen es una de las grandes protagonistas de las elecciones europeas. Pese al ascenso de los partidos de extremaderecha, parece que la candidata del PP europeo a la presidencia de la Comisión Europea conseguirá la reelección. Aunque ha estado coqueteando durante meses con la presidenta de Italia, Giorgia Meloni, tras conocerse los resultados ha tendido la mano a los socialdemócratas y liberales para tratar de llegar a un acuerdo y construir una nueva mayoría proeuropea para los próximos cinco años.
"Hemos construido los puentes necesarios y trabajamos juntos con aquellos que tienen ideas afines y comparten nuestras metas", dijo la cristianodemócrata germana en una comparecencia en la Eurocámara. "Esta plataforma (entre populares, socialdemócratas y liberales) ha funcionado bien, de manera confiable, constructiva y efectiva. Dejadme este primer paso y luego haré el segundo", insistió.
Los grandes grupos proeuropeos -populares, socialdemócratas y liberales- suman 402 de los 720 escaños que componen el Parlamento Europeo. El PPE habría obtenido 185 escaños, mientras que la Alianza de los Socialistas y Demócratas europeos sería el segundo grupo con 137 asientos. Los liberales, entre tanto, lograrían 80 representantes en el Parlamento Europeo.
Tanto los socialdemócratas como los liberales se han mostrado dispuestos a buscar esa mayoría junto al PP europeo. “Estamos dispuestos a negociar un pacto para los próximos años para hacer una Europa más democrática, más fuerte social y económicamente, y también más segura”, explicó Nicolas Schmit, candidato de los Socialistas y Demócratas.
Y en ese momento llegará una de las claves tras estos comicios: el reparto de cargos dentro de la Comisión Europea. La primera tarea será confirmar al candidato a presidente de la Comisión Europea que nominen los jefes de Estado y de Gobierno en las próximas semanas, cargo al que es favorita la propia Von der Leyen.
Queda ahora por saber qué peso real tendrá la ultraderecha en las iniciativas que quiera poner en marcha este nuevo Parlamento Europeo. Por el momento sus resultados ya han provocado la dimisión del primer ministro en Bélgica y la convocatoria de elecciones legislativas en Francia.
Los Conservadores y Reformistas, grupo en el que se integró Vox la pasada legislatura y en el que también estarían los eurodiputados de Giorgia Meloni, experimentan un aumento de cuatro escaños y se sitúan en los 73. Mientras que la ultraderecha de Identidad y Democracia, donde se enmarca el partido de Marine Le Pen, crecería en nueve escaños, hasta los 58.
En el día después de conocerse los resultados, la presidenta de Italia aseguró que el resultado de estas elecciones europeas "impone que Europa mire más a la derecha" y que "Italia tenga un rol fundamental" en el bloque comunitario.
"A mi me interesa hacer mi parte por una Europa distinta a la que hemos conocido en estos años, que haga cosas que a menudo no hizo y que no se meta en materias que no la competen, dejando competencias a los Estados nacionales", prometió Meloni, que ha moderado su discurso en los últimos años.