Cambio climático
Venecia ha intentado, durante esta semana, mantener a salvo a sus turistas y a sus ciudadanos sobre las pasarelas de agua -como la de la Plaza de San Marcos- que esta semana han inundado la ciudad. "Estoy más triste por los edificios de Venecia", nos dice una turista.
Las visitas a la Iglesia de San Moisés no han cesado en estos siete día, donde el agua cubría hasta por las rodillas. Esta semana se han producido en Venecia hasta tres mareas altas, la altura del agua en las calles superaba el 1,50 metros.
Tanto las fuerzas de seguridad del estado como los propios ciudadanos se han ayudado con motores para achicar el agua que encontraban a su paso, y que se introducía tanto en viviendas como en negocios. "Tratamos de hacer frente al agua, pero perdidmos un poco de todo", nos dicen.
El Gobierno ha anunciado que ayudará con 5000 euros a las familias y con 20.000 a los comerciantes. Pero sus negocios no los pueden asegurar contra el 'aqua alta'. "A partir del martes empezaremos a hacer recuento de los daños en el patrimonio de la ciudad", anunció Luigi Brugnaro, alcalde de la ciudad. El consistorio ha estimado que los daños pueden alcanzar los 1.000.000.000 de euros.