La India
Los vecinos dieron la voz de alarma cuando dejaron de ver al bebé. En ese momento, la madre terminó por confesar lo que había sucedido.
El sueño por convertirse en 'influencer' está cada vez más extendido entre la población. Los viajes a paraísos naturales, la invitación a grandes eventos o conseguir una nómina muy elevada por grabar tus experiencias y subirlas a las redes hace que el de 'influencer' parezca el mejor trabajo del mundo. Sin embargo, conseguirlo no es nada fácil y la gente ha llegado a cometer auténticas locuras para cumplir este sueño.
El último caso sorprendente llega desde la India, donde una pareja ha vendido a su bebé para comprarse un móvil.
Sathi y Jaydev son una joven pareja de la India que sueña con convertirse en 'influencers'. Para conseguir esto, lo primero y lo más importante es tener un buen teléfono móvil: la principal herramienta de trabajo. Su situación económica no era una de las mejores, por lo que necesitaban conseguir dinero rápido para comprar uno de los mejores modelos de teléfono móvil. La única idea que se les ocurrió en ese momento fue vender a su bebé.
Esta pareja consiguió encontrar una compradora que les dio la cantidad que pedían por el bebé y, tal y como han confirmado los vecinos, un día regresaron a su casa sin el niño y con un nuevo móvil. Una vez que habían logrado estar ya en la situación que tanto deseaban, emprendieron un viaje a Bengala Occidental para comenzar a grabar sus contenidos para redes sociales.
Cuando regresaron a casa, los vecinos continuaban con sus sospechas y, tras mucho presionar, consiguieron que Sathi confesara lo sucedido. En ese momento, la madre y la compradora fueron detenidas, mientras que el padre está fugado y las autoridades continúan buscándolo por todo el país.
Lo más sorprendente de todo es que esta pareja ya habría intentado vender a su otra hija de siete años.
Por increíble que parezca, las autoridades de la India han confirmado que la venta de niños es cada vez más frecuente en este país para poder sobrellevar las precarias situaciones económicas de muchas familias. Sin embargo, han asegurado que pocos casos habían sido "tan viles" como para cambiar un bebé por adquirir un teléfono móvil.