100 AÑOS DEL HUNDIMIENTO
Veinticinco familiares de pasajeros del Titanic han rendido homenaje este domingo en Barcelona a todas las personas que fallecieron en el hundimiento de este trasatlántico ahora hace cien años.
A tres millas de la costa de Barcelona y a bordo de un velero ,se ha hecho una ofrenda floral a las víctimas y a los supervivientes, organizado por la Fundación Titanic, que este sábado celebró una cena conmemorativa en el Museu Martítim.
En declaraciones a los medios, dos familiares de pasajeros españoles del Titanic, han explicado las historias de sus parientes y de como vivieron la tragedia del transatlántico en 1912.
Paloma Monrós ha relatado que su tío falleció en el Titanic. Este fue a Londres "para aprender inglés" y a través de unos amigos consiguió encontrar trabajo en el famoso crucero.
Dos días antes de embarcar en el Titanic escribió una carta a su madre para decirle que se marchaba a Norteamérica y que a los cuatro días de su llegada "volvería a escribirle" otra misiva, que nunca llegó.
Elena Ugarte ha explicado que su tío, Víctor Peñasco, también falleció en el Titanic: después de casarse en Madrid, se fue de luna de miel con su esposa a París, y en esa misma ciudad, se encontraron con un cartel que anuncia el viaje del transatlántico y decidieron embarcarse.
Ugarte ha explicado que Peñasco estaba "junto con su esposa" en el camarote cuando escucharon un fuerte ruido y empezó a moverse el vaso de leche que tenían sobre la mesita de noche en el momento en que el Titanic chocó contra el iceberg.
La esposa y la doncella de Víctor lograron salvarse pero él falleció porque decidió ceder su sitio en el bote salvavidas a una mujer que viajaba en tercera clase junto con su bebé.