HARTOS DE LA AFLUENCIA DE INFLUENCERS Y TURISTAS
París no cede su corona de reina del turismo. La capital del amor es visitada cada año por millones de personas y, si no todas, la gran mayoría va con cámara en mano. En la época de las redes sociales las calles parisinas tiene miles de rincones que fotografiar y, esto que puede parecer bonito puede acabar convirtiéndose en una pesadilla para los residentes.
Es lo que ocurre en Rue Crémieux, una calle peatonal con casas de dos plantas y fachadas de colores pastel. Los vecinos de esta calle se quejan de que con tanta afluencia de gente cada vez se dificulta más la convivencia, por ello han pedido al ayuntamiento que cierre el paso al público por las noches y los fines de semana, según publica France Info.
Hartos de tanto 'influencer' que todo lo quieren retratar han decidido también unirse con humor a la lucha por esta causa y han creado en Instagram una página llamada Club Crémieux en la que publican las excentricidades que llega a hacer la gente para capturar la mejor imagen.