EEUU | SEGÚN RECOGE EL DIARIO DAILY MAIL
Filadelfia ha pedido a sus residentes que no llenen los contenedores de basura de agua para transformarlos en piscinas vecinales, ya que ese no es el fin para el que se alquilan.
Los vecinos han cuidado todos los detalles, y han colocado en la parte inferior de los contenedores una madera, de modo que no se hagan daño en los pies, mientras que en las esquinas hay lonas para que los invitados disfruten de un buen baño sin sufrir ninguna herida.
El agua la sacaron de bocas de incendio, lo que ha provocado la indignación de muchos vecinos que se encontraron mangueras ahí enganchadas y que conducían hasta el contenedor. Además, posteriormente se ha conocido que se emplearon alrededor de 12.000 litros de agua, lo que causó el mayor problema con las autoridades municipales.
Desde el Ayuntamiento han informado de que no se otorgarán licencias para estas piscinas improvisadas, ya que el agua ha de estar disponible en caso de incendio, y los contenedores tienen otra finalidad.