Coronavirus
La mayoría de los adultos de una ciudad brasileña han sido vacunados contra el coronavirus en un estudio sobre la inmunización masiva que cuenta con el apoyo de la OMS.
Brasil ha sido uno de los países más afectado por la pandemia de la COVID-19 en el mundo, que además tiene una variante muy infecciosa. El país comenzó el domingo un estudio inédito sobre la inmunización masiva y vacunó a la mayoría de los adultos de una ciudad de 150.000 habitantes contra el coronavirus. Los resultados de este "estudio de vida real" en Botucatu, Sao Paulo, podrían ser utilizados internacionalmente. El proyecto cuenta con el apoyo de la Fundación Bill y Melinda Gates y la aprobación de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Uno de los objetivos marcados por los responsables del proyecto fue vacunar a 80.000 personas entre los 18 y 60 años, cerca del 80% de la población total. Sin embargo, los mayores de 60 años ya contaban con la vacuna porque fueron los primeros en recibirla al inicio de la campaña en enero. Como consecuencia, al menos el 90% de los adultos de la ciudad estarán inmunizados al final de esta semana, según sus estimaciones. El experimento durará ocho meses e incluye la aplicación de dos dosis y el seguimiento del estado de salud de los participantes, así como el de los vecinos de ciudades cercanas, que servirán para comparar los resultados obtenidos.
Cotejar los datos finales permitirá comprobar si hay contagios después de la inmunización e identificar variantes que puedan seguir produciendo casos positivos e identificar las características genéticas o de compartimiento que puedan incidir en la prevalencia de las infecciones.
Los investigadores en la campaña de vacunación
La campaña forma parte de una investigación del Ministerio de Salud y la Universidad Estatal Paulista (Unesp) junto al laboratorio AstraZeneca y la Universidad de Oxford para estudiar la eficacia de la inmunización masiva. También participa la Fundación Oswaldo Cruz, vinculada al Ministerio de Salud, el mayor centro de investigación médica de América Latina y que tiene la licencia para fabricar en Brasil 210 millones de dosis de la vacuna de Oxford.
Según el epidemiólogo Cargos Magno Fortaleza, investigador de la Unesp y uno de los coordinadores del estudio, es la primera vez que una ciudad de más de 100.000 habitantes es sometida a un tipo de experimento de este tipo en el mundo. El investigador ha afirmado que Botucatu fue escogida precisamente por su tamaño para que las conclusiones puedan dar una "real dimensión" del efecto de la vacuna en la reducción del número de casos, hospitalizaciones y muertes por coronavirus.