Coronavirus
La administración de Estados Unidos se esfuerza por convencer a sus ciudadanos para que se vacunen, a la vez que varios países del sudeste asiático viven su nivel de contagios diarios más alto desde el inicio de la pandemia.
El coronavirus, impulsado por la variante Delta, continúa su expansión. Gobiernos de todo el mundo recuperan restricciones para impedir que pueda ralentizar los procesos de vacunación porque, pese a todo, son precisamente las vacunas la herramienta principal en estos momentos para frenar el avance del virus.
La voluntad de Estados Unidos es una prueba de ello. Allí, continúa la batalla para convencer a los ciudadanos para que se vacunen. En estos momentos, el 68% de los adultos tienen al menos la mitad de la pauta, pero el parón de los pinchazos es más que evidente, ya que se administran una media de 520.000 dosis al día, muy lejos de los tres millones que se logró en el mes de abril.
La preocupación de las autoridades es evidente después de que notificaran casi 24.000 nuevos casos durante el fin de semana y la curva de contagios marque una clara tendencia al alza desde manera clara desde principios de julio, mientras que cada día es habitual que mueran varios centenares de personas.
El principal problema al que se está enfrentando la administración Biden es el desinterés por las vacunas. Tal es el punto que la directora de los Centros de Prevención y Control de Enfermedades de EEUU, Rochelle Walensky, definió la realidad actual como "una pandemia de personas no vacunadas". Es a este grupo de la población al que el Gobierno está responsabilizando del repunte de contagios y que ha hecho que varios Estados den marcha atrás en sus planes de desescalada y relajación de las restricciones.
Repunte en Asia
Una de las regiones donde está ganando terreno en las últimas semanas es el sudeste asiático. Indonesia, Vietnam, Camboya o Birmania viven en las últimas semanas la peor ola desde el inicio de la pandemia, que se explica por la expansión de la variante delta y el retraso de sus respectivas campañas de vacunación.
El Indonesia, los datos diarios empeoran los que registran Brasil o India con 34.257 contagios y 1.338 fallecidos en las últimas 24 horas. A la mayor presión hospitalaria se une, además, la escasez de oxígeno para atender a los pacientes que lo necesiten.
Tailandia también se encuentra en una situación complicada. En el último día ha sumado 11.784 casos y el Gobierno ha alertado de que las cifras podrían triplicarse. Para contener esta escalada, las autoridades han anunciado que, desde el miércoles, se suspenderán las rutas aéreas locales con origen o destino de alguna de las 13 provincias con alto riesgo, entre ellas Bangkok.
A pesar de las alertas, la población tailandesa se ha manifestado en contra de las restricciones impuestas por el Gobierno y la policía ha disuelto las protestas con cañones de agua y gases lacrimógenos.
Arabia Saudí también extrema las precauciones. Sus ciudadanos necesitarán las dos dosis de la vacuna a partir del 9 de agosto para poder salir del país. Mientras, la mascarilla es obligatoria para todos los que en estos momentos peregrinan a La Meca.