EN GALICIA
María Josefa Fernández, tiene 75 años y lleva desde los 21 conduciendo sin carné. Ella dice que lo sacó en 1963 pero que por desgracias familiares no pudo recogerlo y le ha caducado. Mantiene que merece tenerlo, porque no ha tenido siniestros graves.
En mayo le confiscaron su vehículo y el depósito municipal le reclama siete euros diarios. Asegura que comprará otro coche y seguirá conduciendo.
Hace un año la condenaron tras un accidente en una rotonda y en diciembre tendrá que responder de nuevo ante el juez por un percance al salir de un garaje.