LA MEDITACIÓN AYUDÓ A LOS NIÑOS
Pocos días después de que terminara el rescate de los niños atrapados en la cueva de Tailandia, se ha celebrado una ceremonia budista. Precisamente, a los niños les fue muy útil la práctica de la meditación, guiados por el joven entrenador de 25 años, que fue monje budista durante una década.
Es posible que, mientras los niños estaban en la cueva sin ser descubiertos, sintieran ansiedad, miedo, confusión, vulnerabilidad, dependencia y puede que también desesperanza, según explican los médicos. La meditación habría ayudado a que todos estos estados de ánimo los vivieran de manera más tranquila. Además, la meditación permite mantener la calma y preservar la energía.
El padre de uno de los niños ha afirmado que los pequeños se harán monjes en homenaje al buzo tailandés que perdió la vida durante las labores de rescate.