UNA TORMENTA POTENCIALMENTE DEVASTADORA
Las autoridades de Carolina del Sur han ordenado la evacuación forzosa de un millón de personas de la región costera con vistas a la llegada del huracán 'Florence', que podría tocar tierra el próximo jueves.
Las autoridades de Carolina del Norte, por su parte, han emitido este lunes las primeras órdenes de evacuación para los vecinos y turistas de las islas de la barrera de Outer Banks, lo que equivale al desplazamiento de unas 250.000 personas.
Mientras, el presidente estadounidense, Donald Trump, muy criticado por la lenta respuesta al paso del huracán 'María' por Puerto Rico, ha cancelado un acto previsto para el viernes en Jackson, Misisipi, por motivos de seguridad debido al paso de 'Florence'. Además, el Ejército ha anunciado el envío de un equipo de 750 militares a Raleigh, Carolina del Norte, para coordinarse con las autoridades estatales y federales. La Marina, por su parte, desplazará a 30 de sus buques a mar abierto para evitar daños.
A las 11.00 horas (hora local) de este lunes la tormenta generaba ya vientos de 185 kilómetros por hora, lo que la convierte en un huracán de categoría 3 en la escala Saffir-Simpson, informa el Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos. El aviso señala que la tormenta será "un huracán extremadamente peligroso" cuando toque tierra. Ahora mismo se encuentra a unos 2.000 kilómetros al este-suroeste del cabo Fear, Carolina del Norte.
La población ha acudido a los supermercados y gasolineras de los dos estados para hacer acopio de alimentos y gasolina ante la creciente fuerza del fenómeno meteorológico.
Las evacuaciones han provocado que algunas gasolineras de la zona costera se hayan quedado sin suministros, según ha indicado un portavoz de la Asociación de Petroleros de Carolina del Norte, que han confirmado que los suministros han sido reemplazados rápidamente.