LO CONSIDERA UNA "INJURIA AL PROFETA"
El Gobierno turco ha asegurado este jueves que publicar caricaturas de Mahoma no es libertad de prensa sino una injuria al profeta, por lo que no permitirá la difusión de la portada del nuevo número de la revista Charlie Hebdo.
"La libertad de prensa no debe confundirse con la libertad de difamación. Un insulto contra el profeta (Mahoma) no es libertad de prensa", afirmó el primer ministro, Ahmet Davutoglu.
De esta forma, el jefe del Gobierno respaldó la decisión tomada ayer por un tribunal que obliga a bloquear el acceso a los medios digitales que muestren dicha portada, en la que figura una caricatura de Mahoma entristecido por los asesinatos de los dibujantes y un cartel en la mano que dice "Yo soy Charlie".
Davutoglu reiteró su rotunda denuncia "contra todo tipo de atentados terroristas porque en ellos mueren inocentes; en París murió el policía Ahmed Merabet, que era musulmán", recordó.
"Pero igual de clara que era nuestra postura en (la marcha) de París, lo es ahora respecto al profeta", repitió.
"En este país no daremos permiso para que se injurie al profeta", insistió.
"Cuando hablamos de una persona admirada por 1.500 millones de personas, de un gran modelo, de un profeta, no se trata de libertad de prensa", concluyó.
Justificó el registro ayer de los camiones de distribución del diario Cumhuriyet, para asegurar que no se distribuyera la portada de Charlie Hebdo y argumentó que "cuando se difunde este tipo de injurias hay que tomar medidas por ser un problema de seguridad".